Hola Ernest, ¿Podría presentarse usted mismo? ¿Cuál es su trayectoria profesional? ¿En qué sectores de actividad ha trabajado?
Hola, claro que si, soy Ernest Claramunt Freixanet, un joven de 64 años. Nací y resido en Barcelona, y pertenezco a la cuarta generación de una familia vinculada a la industria textil.
Ingeniero industrial por la ETSIIT, empecé mi andadura profesional en el grupo industrial textil familiar
Durante mi trayectoria profesional he montado diversas empresas, y también he desmontado algunas de ellas (de todo se aprende):
1980 Hilados Rusiñol (hilatura)
1984 Hilados Escolá (hilatura)
1987 RO&ER (diseño y venta de textil hogar)
1988 Hilados San Quirico (hilatura)
2003 Logic Energy (plantas gasificadoras de biomasa)
2010 Itefor Plus (instalaciones de energías renovables)
2011 Cau Faluga – Colonia Rusiñol (restauración y eventos)
Dirigí el grupo textil familiar hasta que en el año 2010 decidí que tocaba cerrar. La fabricación de hilados en España ya no era rentable.
Desde entonces aprovecho toda la experiencia acumulada, para ayudar a empresas productoras a rebajar sus costes de fabricación, y por tanto a mejorar su rentabilidad.
Para ello utilizo una metodología propia ya aplicada en empresas de éxito, que consiste en analizar la experiencia de los equipos, para diseñar y aplicar las medidas necesarias para eliminar las fugas económicas de los procesos productivos.
Imagínese poder mejorar los beneficios y motivar al personal de forma simultánea, ¿qué más puedes pedir?
Usted es consultor y especialista en “Eficiencia empresarial” ¿Nos podría explicar que entiende usted exactamente por “eficiencia empresarial”?
Una empresa eficiente es la que produce más y mejor, con menos recursos. Gracias a la eficiencia, producir más no implica trabajar más.
Mejorar la organización y la eficiencia es algo que las empresas deberían gestionar internamente. ¿Entonces porque recurren a sus servicios para conseguirlo?
A nivel de organización y eficiencia todos los procesos productivos son mejorables. El gran problema de muchas empresas es que no son conscientes de ello.
Las personas tenemos la capacidad de asimilar. Por ejemplo tardamos unas horas en asimilar un ruido, entre dos días y dos semanas en asimilar el uso de gafas, o aproximadamente un año en asimilar la amputación de un miembro.
Esta capacidad para asimilar, nos hace llegar a considerar normales situaciones que no lo son, y por tanto a perder objetividad.
Por ello muchas empresas, desde su visión subjetiva, creen contar con procesos productivos eficientes cuando en realidad no lo son.
Yo les aporto la objetividad que ellos han perdido, para descubrir todo lo que se puede mejorar y así incrementar la eficiencia del proceso productivo.
Y entrando al detalle, ¿Cómo se actúa en un proceso productivo para maximizar la eficiencia?
Como ya he comentado, mi metodología se basa en aprovechar uno de los mayores activos que tienen las empresas, que es la experiencia acumulada por sus equipos.
Este tesoro (que muy pocas empresas aprovechan) complementado con mi experiencia, me permite aplicar al proceso las medidas necesarias para mejorar la eficiencia.
Estas medidas incluyen soluciones de tipo mecánico, automatización, seguridad laboral, ergonomía, organización, etc., y van a permitir maximizar la eficiencia del proceso productivo, maximizando la producción, la productividad y la calidad, y minimizando las mermas y los accidentes laborales.
Pero todo ello sólo es posible si disponemos de ese tesoro, y por ello lo primero que hace este método es motivar a las personas para que aporten toda su experiencia.
Cuál es su visión y opinión acerca de la situación actual de la eficiencia y organización en la industria de nuestro país. ¿Hay mucha diferencia entre tipos de empresa y/ entre sectores productivos?
Según los datos de la Oficina de Estadística Europea Eurostat, la productividad española se sitúa en 93 puntos respecto a los 104,7 puntos del promedio de la eurozona.
Nuestra productividad y consecuentemente nuestra eficiencia, está muy por debajo de países como Francia, Alemania, Italia o Irlanda, y por tanto nos falta mucho por mejorar.
Entre sectores también hay grandes diferencias. El más productivo y a gran distancia de los demás es el sector de la automoción.
¿Y porque es el más eficiente? … Por necesidad. Para construir un automóvil, en primer lugar hay que fabricar miles y miles de piezas que luego habrá que ensamblar con altísima precisión. Un proceso productivo ineficiente, generaría un coste tan alto que el automóvil sólo estaría al alcance de unos cuantos millonarios.
Gracias a la altísima eficiencia de los procesos productivos de este sector, el automóvil es accesible a muchísimas personas.
En cuanto a eficiencia, como muy mejorables podríamos considerar a los sectores textil, farmacéutico y alimentación.
Y como extremadamente mejorable al sector de la construcción.
Durante los últimos años, usted ha desarrollado y aplicado el método RHS (Risk & Hazards Simulators) para la formación en seguridad laboral. ¿En que se basa dicho método?
Cada año las empresas invierten más recursos en seguridad laboral, y en cambio los accidentes siguen aumentando.
El objetivo fue claro, conseguir que las empresas no tiren el dinero sino que lo inviertan en acciones que realmente reduzcan la accidentabilidad.
De esta reflexión nació el método RHS, que es un sistema de formación muy eficiente basado en la práctica en simuladores.
El método consta de:
- Simulador diseñado según la problemática de cada empresa
- Formación teórica sobre los peligros y como evitarlos
- Formación práctica en el simulador para enseñar a trabajar de forma segura
- Evaluación mediante test de los conocimientos adquiridos
- Certificación oficial
En el simulador las personas visualizan los peligros, y practican para aprender a trabajar de forma segura y eficiente.
Según su experiencia, ¿cuales son las virtudes del método de formación RHS?
Las principales virtudes son:
- La formación es práctica y por ello muy eficiente. Recordemos que una imagen vale más que mil palabras y una práctica más que mil imágenes
- La formación es muy dinámica. Los participantes no duermen, solo aprenden, y por tanto se optimiza el tiempo y la inversión
- Es una formación muy específica y por tanto centrada en lo que realmente interesa
- Permite cumplir el art. 19 de la Ley de PRL que obliga a las empresas a formar de forma práctica a sus empleados.
- La certificación oficial salvaguarda a las empresas en caso de accidente laboral
- Genera un alto grado de satisfacción en todos los participantes
Ernest, ¿nos podría explicar algún caso de éxito en el que haya intervenido recientemente, tanto en mejora de procesos productivos como en formación mediante el método RHS?
En cuanto a la mejora de procesos productivos para maximizar la eficiencia, ahí van algunos resultados alcanzados en empresas de éxito:
- Incremento de producción superior al 22%
- Aumento de productividad superior al 20%
- Reducción de defectos mayor al 42%
- Reducción de accidentes laborales superior al 40%
En cuanto al método RHS quiero mencionar a Grifols, una empresa de éxito, líder mundial en medicamentos derivados del plasma.
Esta compañía contactó con nosotros hace unos ocho años, para implementar el método RHS desde sus departamentos de Seguridad y Salud, y Formación.
Se fabricó un simulador específico que reproduce una parte de su instalación, y desde entonces ya se han formado a más de 2.000 personas, con excelentes resultados en cuanto a capacitación en seguridad laboral, y satisfacción de los participantes.
Muchas gracias Ernest, y enhorabuena por el trabajo llevado a cabo.