Hola Julius, para situarnos, ¿Te podrías presentar? ¿Quién es Julius Lamb?
Soy Socio de Auren Personas. Llevo 20 años ayudando a personas, equipos y organizaciones a dar lo mejor de sí. En este tiempo he trabajado en proyectos de cambio, y desarrollo de talento y sobre todo liderazgo en organizaciones pequeñas y grandes en 20 países diferentes. Soy un apasionado de las personas, la innovación y la cultura organizacional. Mi misión: ayudar a crecer a organizaciones, equipos y personas haciendo que el trabajo sea más humano.
Auren Personas es un grupo dedicado a la gestión de personas, ¿Podría contarnos un poco más sobre el grupo y sus servicios?
Auren personas es la división de consultoría de recursos humanos de Auren.
Auren es la primera empresa española de servicios profesionales y proporciona soluciones en áreas de auditoría, consultoría, abogados y asesoría fiscal y corporate y desde la incorporación de BLC también en la especialidad de recursos humanos. Desde recursos humanos ofrecemos soluciones en todos los pasos del recorrido de las personas en las organizaciones; selección, consultoría, comunicación, desarrollo de talento, coaching, interim management y reskilling.
Julius, ¿Cuál es vuestra forma de ayudar a los clientes para atraer, gestionar y desarrollar personas?
Creemos firmemente en dos principios básicos; partnership con el cliente e innovación pragmática. La primera define nuestra relación con el cliente, y pone por delante el éxito y os resultados del cliente. Buscamos conversar con, y comprender a nuestros clientes para poder proponerles soluciones realistas que tengan un impacto positivo sobre su negocio. Esto lo hacemos con técnicas y herramientas innovadoras, ágiles y prácticas que aporten eficiencia a nuestras soluciones y ayuden a nuestros clientes a prepararse para restos actuales y futuros.
A raíz de esta pandemia de Covid19, escuchamos mucho la palabra “TELETRABAJO”, incluso se han promulgado normas para regularlo. Como especialista en la materia cómo definiría usted el “TELETRABAJO”?
El teletrabajo no es nada nuevo, muchas empresas lo han descubierto a la fuerza durante la pandemia, pero ya era una práctica muy común en empresas con equipos deslocalizados. El teletrabajo es una formula que permite a las personas trabajar de manera eficiente sin tener que estar necesariamente en el mismo sitio.
¿Considera que lo que se ha ido aplicando en las organizaciones durante esta pandemia de Covid19 es realmente “teletrabajo”?
La pandemia nos forzó a un teletrabajo improvisado. La mayoría de las organizaciones que conozco lo implementaron en cuestión de horas y funcionó. En nuestro caso somos 900 personas trabajando en España. En 24 horas desde el anuncio del confinamiento de Marzo, el 90 % estaban trabajando desde casa y en 72 horas el 100%. La improvisación funcionó bien, pero las empresas han tenido que ir haciendo cambios, y tendrán que hacer todavía más, para que sea un modelo sostenible.
¿Cree que esta nueva forma de trabajar ha llegado para quedarse?
No hay duda. Un estudio reciente de Gartner preguntó qué cambios implementados a raíz de la crisis de Covid, se mantendrían para el futuro. El 90 % de las empresas contestaron “teletrabajo total o parcial”
Hace poco Spotify declaró que permitiría trabajar a sus empleados en “full remote” y además desde dónde quisieran y con sueldo de San Francisco. Puedes trabajar desde casa en Barcelona, o en Cádiz, o París o Formentera o dónde quieras. Este tipo de cambios invita a reforzar el trabajo a distancia, pero también a repensar cómo funcionan las organizaciones.
El liderazgo en las empresas debe cambiar para adaptarse a las necesidades de una plantilla diversa y remota o semi remota.
¿Qué opina del Teletrabajo? ¿Cómo cree que puede afectar a las personas (tanto de forma positiva como negativa)? ¿Qué implicaciones conlleva, tanto para empleados como para empresas?
El full remote no es para todo el mundo. Pero tampoco ir a la oficina cada día era para todo el mundo. Si lo pensamos las nuevas configuraciones de oficinas que había surgido en los últimos años, con espacios abiertos, colaborativos y sociales son ideales para los extrovertidos, pero no tanto para los introvertidos. El introvertido está más contento trabajando desde casa mientras el extrovertido está loco por volver a la oficina y al trabajo social.
El liderazgo en las empresas debe cambiar para adaptarse a las necesidades de una plantilla diversa y remota o semi remota. El estilo de liderazgo debe adaptarse a esa realidad, así como las prioridades del líder que deben centrarse en un liderazgo facilitativo y priorizar temas como crear comunidad, inclusión y bienestar, además de objetivos y resultados.
Más allá de legalismos: Teletrabajo y Prevención de Riesgos Laborales ¿son conceptos que se pueden conjugar fácilmente?
Sin duda el trabajo en un entorno privado, ajeno al control de la empresa, añade complejidad a la prevención de riesgos laborales. Esto es aún más relevante en el caso del teletrabajo “improvisado” en el que ha primado la continuidad del trabajo a la ergonomía o bienestar. Pero bien organizado son conceptos completamente compatibles. Existen criterios para la idoneidad del teletrabajo que tiene que ver con espacio disponible, ergonomía y salud en el puesto de trabajo y también la tecnología nos permite cuidar de los empleados que trabajan en remoto y facilitar la conciliación de la vida laboral y personal aun trabajando desde casa.
( NOTA DEL EDITOR. MÁS INFO SOBRE TELETRABAJO Y PRL: AQUÍ )
¿Tendrías alguna recomendación para las personas que teletrabajen?
Mis recomendaciones son:
- Crear rutinas y hábitos saludables. Conectar y desconectar en horarios pactados con el equipo de trabajo.
- Cuidar de los cuadrantes vitales: Alimentar el “yo profesional”, el “yo familiar” el “yo social” y el “yo personal”
- Trabajar el desarrollo profesional. No por trabajar en casa debemos estar haciendo siempre lo mismo. Busquemos retos profesionales, sigamos aprendiendo.
- Alternar trabajo individual y trabajo social: El trabajo individual, focalizado y sin interrupciones nos proporciona productividad y eficiencia. El trabajo social, participar en reuniones de equipo, socializar y compartir y ayudar a otros compañeros de trabajo evita el aislamiento y el sentimiento de soledad.
- Gestionar la energía: Nuestro cerebro se alimenta de glucosa, pero esto no quiere decir que tengamos que comer donuts a diario. A nuestro cerebro también le encanta el lactato y eso lo producen los músculos al hacer ejercicio. Además, el ejercicio físico también nos ayuda a generar endorfinas que producen sensación de bienestar. Así que menos bombones y más sentadillas 🙂
Muchas gracias, Julius